Hace justo un siglo, el 16 de julio de 1908, un puñado de alumnos fundó la Sociedad de la Escuela Nacional de Ingenieros, entre los objetivos de esta sociedad establecieron la necesidad de mejorar su institución, entre otros mediante la publicación de los trabajos de mayor importancia en la comunidad de ingenieros; para ello se creo la Revista de Ingeniería. Órgano de la Sociedad de la Escuela Nacional de Ingenieros cuyo primer número apareció en septiembre de 1908.

La publicación tuvo éxito, interrupciones, resurgimientos, nuevas épocas, etcétera, pero lo importante es que ha sido, durante 100 años, un medio de difusión para el gremio ingenieril y la comunidad Universitaria.

La revista integró en sus páginas los problemas de cimentación y los alarmantes hundimientos que presentaban los monumentos arquitectónicos que en ese tiempo eran considerados “modernos” como: la Dirección General de Correos, la entonces compañía de seguros La Mutua, el Teatro Nacional que estaba en plena construcción.

En 1933 difundió en la comunidad universitaria la declaración de la total autonomía de la institución que agregó este hecho a su nombre, quedando desde entonces como Universidad Nacional Autónoma de México. Asímismo, en 1956, publicó la noticia de la aprobación por el Consejo Universitario de los programas de posgrado, que convertían a la Escuela Nacional de Ingenieros en la Facultad de Ingeniería.

En la década de los 80, la revista sufre cambios importantes que marcan definitivamente el camino hacia el reconocimiento de que es una publicación científica, eliminando la publicidad comercial, formando un consejo editorial, legalizando su nombre ante la Secretaría de Gobernación y la Dirección de Derechos de Autor de la SEP, y estableciendo la evaluación de los artículos por especialistas de gran prestigio en el área correspondiente.
Para fines de los 90, la revista adquiere el nombre que lleva hoy, con el cual está registrada en los organismos de gobierno pertinentes y en importantes índices mexicanos e internacionales como Latindex, el Indice de revistas de investiación científica y tecnológia de CONACyT, OEL, Scielo México, Redalyc y E-Journal.

Este proceso de certificaciones ha ofrecido a la Revista una visión mayor, física y electrónica, ya que algunos índices del calibre de Redalyc muestran datos bibliométricos de gran apoyo para conocer el estado de registro en cuanto a visitas a nivel de Latinoamérica, así como comparativos con otras publicaciones de prestigio con la misma especialidad.

En la actualidad, la revista tiene convenios de intercambio con publicaciones nacionales e internacionales de ingeniería; participa en ferias de libro y foros de ingeniería.

No se puede dejar de mencionar que la revista ha llegado a este punto de prestigio gracias al arduo esfuerzo de muchas administraciones, y más importante, gracias al trabajo todos los autores, evaluadores, lectores y demás miembros de la comunidad ingenieril, quienes son la materia prima para que una publicación con tantos años de reconocimiento logre permanecer por lo menos otros 100 años con la imagen que merecidamente tiene.

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